Nike ha logrado un progreso significativo en sus esfuerzos de sostenibilidad, reduciendo más del 60% de sus emisiones de CO2 y liderando el mercado de artículos deportivos en valor. En su informe de impacto de 2023, la compañía reveló que el 96% de su energía proviene de fuentes renovables, una mejora notable desde el 48% en 2020. Además, ha reciclado el 80% de sus residuos, transformándolos en otros bienes y productos. Este compromiso con la sostenibilidad responde a la demanda de las generaciones más jóvenes, que prefieren productos sostenibles y están dispuestas a pagar más por ellos.

El marketing verde se ha convertido en una estrategia clave para Nike, alineándose con las expectativas de las generaciones Z y millennial. La marca ha implementado medidas enfocadas en sus métodos de producción, como la innovación en materiales bajos en carbono y el uso de energías renovables, para reducir su huella ambiental. Estas acciones no solo reflejan el compromiso de Nike con el medio ambiente, sino que también fortalecen su imagen de marca y la hacen más atractiva para los consumidores conscientes del impacto ambiental.

Nike no está sola en esta iniciativa; otras marcas como Puma también han adoptado políticas sostenibles, demostrando que la preocupación por el medio ambiente es una tendencia creciente en la industria. La reducción de la huella de carbono y el impulso hacia la sostenibilidad son pasos cruciales para las marcas que buscan ser referentes para las nuevas generaciones y contribuir positivamente al planeta.